
Día mundial del cuidador. Síndrome del cuidador
Durante el año pasado (2022), la Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo pública una serie de datos relevantes acerca del consumo de alcohol a lo largo del mundo. Entre estos podríamos destacar:
- El uso nocivo de alcohol es un factor causal en más de 200 enfermedades y trastornos, como el alcoholismo, la cirrosis hepática, algunos tipos de cáncer y diversas enfermedades cardiovasculares.
- Cada año se producen 3 millones de muertes en el mundo debido al consumo nocivo de alcohol (un 5,3% de todas las defunciones). Además, el consumo de alcohol provoca defunción y discapacidad a una edad relativamente temprana, lo que se asocia no únicamente al consumo directo de bebidas alcohólicas, sino a daños colaterales, como accidentes de tráfico o violencia interpersonal.
- Más allá de las consecuencias para la salud, el consumo nocivo de alcohol acarrea importantes pérdidas sociales y económicas a las personas y a la sociedad en general. Es importante tener en cuenta esta información para recordar que los perjuicios no afectan únicamente a la persona consumidora, sino que tienen graves efectos sobre otros ámbitos, especialmente el familiar.
Existe amplia bibliografía que es posible consultar para conocer las tasas de consumo de alcohol, las cifras de alcoholismo o las principales consecuencias de un uso prolongado a lo largo del tiempo sobre las distintas esferas vitales de los individuos. Sin embargo, nos encontramos en una sociedad que se muestra abierta hacia esta sustancia, de manera que en muchas ocasiones se minimizan los posibles efectos de la misma. De hecho, por mencionar algunos datos, según la encuesta EDADES 2019/2020, el 5,2% de la población española de 15-64 años presenta un patrón de consumo de riesgo de alcohol, siendo más grave entre los varones.
Precisamente para intentar concienciar sobre las consecuencias del consumo de alcohol y así fomentar que las personas se responsabilicen sobre el uso que hacen de esta sustancia, la OMS ha situado el día mundial sin alcohol cada 15 de noviembre.
El alcoholismo
Aprovechando la ocasión, consideramos que es importante hacer llegar a la población una mínima información acerca de la enfermedad más conocida vinculado al uso del alcohol: el alcoholismo.
Esta patología, también conocida como síndrome de dependencia alcohólica, se define como un estado psíquico y habitualmente físico resultante de tomar alcohol de forma continua o periódica. Suele ir acompañado de diferentes signos, siendo destacables los siguientes cinco:
- Deseo irrefrenable de consumir alcohol
- Dificultad para controlar el consumo
- Abandono de aspectos importantes de la vida
- Síntomas de tolerancia y síndrome de abstinencia si no se bebe
- Continuar consumiendo a pesar de conocer los perjuicios
Es fundamental resaltar que se trata de una enfermedad crónica que ocasiona deterioro severo en los aspectos más importantes de la vida (familiar, social, laboral…). Tener en cuenta esta realidad es clave para evitar culpabilizar a la persona, aspecto que suele resultar contraproducente para su recuperación. Por lo contrario, proponemos la escucha activa y el empoderamiento para que la persona sea consciente de su problema y sea capaz de pedir ayuda.
¿Qué podemos hacer?
En el caso de que seas una persona consumidora, comienza por pararte a pensar en los pros y los contras de mantener este hábito de consumo. Si detectas alguna consecuencia negativa, imagina cómo sería tu vida libre de tales perjuicios y plantéate la posibilidad de cambiar. ¿Qué razones tendrías para dejar de beber? Anota estas razones en una lista y ponla en comparación con los motivos para seguir bebiendo a pesar de que ahora eres consciente de las consecuencias que ello provoca.
Recuerda que tienes mucho que ganar, pero sólo tú puedes decidir hacerlo. No dudes en pedir ayuda cuanto antes para realizar este camino.
Si eres un familiar o cualquier otra persona allegada, intenta poner de manifiesto las consecuencias que el consumo está provocando en las diferentes áreas vitales de la persona y saca a relucir que existen alternativas a esta forma de vida. En lugar de culpa y reproches, intenta escuchar y poner énfasis en animarle a pedir ayuda.
En ocasiones la impotencia que provoca esta situación genera malestar relevante, no dudes en pedir ayuda para ti si te ves en esta situación.
La terapia psicológica es un pilar fundamental del tratamiento cuando existen problemas con el consumo de alcohol. La ayuda no se dirige únicamente a la persona consumidora, sino también a su familia o aquellas personas que estén resultando afectadas por este consumo. Si te encuentras en alguna de estas situaciones, no dudes en pedir ayuda.
¿Alguna duda? No dudes en ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de ayudarte.